Hoy vamos hablar sobre un mal muy generalizado al que no le damos la relevancia que realmente tiene. Primero porque tenemos la idea de que es exclusiva de los adultos, lo cual es incierto. Hay más niños con depresión de lo que nos pensamos. Tenemos la creencia de que los niños y adolescentes son felices por naturaleza, nada más lejos de la realidad. Y como podemos suponer cuanto más tiempo se lleve padeciendo más grave y difícil de solucionar, por lo que ante la duda id a un profesional, más vale que nos evalúen y nos digan que no es nada, que ir arrastrándolo y vivirlo como una desgracia. Dicho esto, no voy a centrarme en cuál es el origen de la depresión, si es debida a una disfunción cognitiva, a problemas de procesamiento de la información o a otras causas, eso lo dejo a los expertos. Voy hablar de los síntomas, por si los reconocéis y os veis reflejado a vosotros o a alguna persona cercana.
El trastorno va desde manía (Estado emocional en el que se observa un ánimo exaltado, expansivo, irritable junto con pérdida de identidad, hiperactividad y pensamientos y actos de grandiosidad. Dura al menos una semana) a Depresión (Estado emocional que se caracteriza por sentimientos de tristeza, desilusión y desesperación).
Trastorno distímico (es en el que nos vamos a centrar hoy) Según CIE 10:
- Estado de ánimo crónicamente depresivo la mayor parte del día de la mayoría de los días, manifestado por el sujeto u observado por los demás, durante al menos 2 años.
(Nota: En los niños y adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable y la duración debe ser de al menos 1 año.)
- Presencia, mientras está deprimido, de dos (o más) de los siguientes síntomas:
- Pérdida o aumento de apetito
- Insomnio o hipersomnia
- Falta de energía o fatiga
- Baja autoestima
- Dificultades para concentrarse o para tomar decisiones
- Sentimientos de desesperanza
- Durante el período de 2 años (1 año en niños y adolescentes) de la alteración, el sujeto no ha estado sin síntomas de los Criterios a y b durante más de 2 meses seguidos.
- No ha habido ningún episodio depresivo mayor durante los primeros 2 años de la alteración (1 año para niños y adolescentes); por ejemplo, la alteración no se explica mejor por la presencia de un trastorno depresivo mayor crónico o un trastorno depresivo mayor, en remisión parcial.
Nota: Antes de la aparición del episodio distímico pudo haber un episodio depresivo mayor previo que ha remitido totalmente (ningún signo o síntoma significativos durante 2 meses). Además, tras los primeros 2 años (1 año en niños y adolescentes) de trastorno distímico, puede haber episodios de trastorno depresivo mayor superpuestos, en cuyo caso cabe realizar ambos diagnósticos si se cumplen los criterios para un episodio depresivo mayor.
- Nunca ha habido un episodio maníaco, un episodio mixto o un episodio hipomaníaco y nunca se han cumplido los criterios para el trastorno ciclotímíco.
- La alteración no aparece exclusivamente en el transcurso de un trastorno psicótico crónico, como son la esquizofrenia o el trastorno delirante.
- Los síntomas no son debidos a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., una droga, un medicamento) o a enfermedad médica (p. ej., hipotiroidismo).
- Los síntomas causan un malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.
Puede ser de:
- Inicio temprano: si el inicio es antes de los 21 años
- Inicio tardío: si el inicio se produce a los 21 años o con posterioridad
Aprovecho para recordar que la medicación que nos receta el médico de cabecera o el psiquiatra no es la solución, es una ayuda. Hay que ir a un profesional para que nos de pautas y seamos capaz de mejorar nuestra calidad de vida. Los fármacos sin ayuda cronifican la patología creándonos una dependencia que después es muy difícil de dejar.
Para terminar os dejo una frase de Dorthy Rowe que espero que os haga pensar:
“La depresión es una prisión en la que eres tanto el prisionero como el cruel carcelero”